¿Cómo adaptar el ayuno intermitente al verano?
El ayuno intermitente se ha convertido en uno de los métodos más recurrentes a la hora de realizar descansos digestivos para nuestro cuerpo o buscar encarecidamente una pérdida de peso. Una práctica que empezó a verse con asiduidad en la década de los 70 entre los círculos de la jet set estadounidense y que llegó a España extendiéndose entre la población más concienciada con la salud y la sobre alimentación.
Con la llegada del verano y de las altas temperaturas, son muchas las personas que ponen en duda este método nutricional por miedo a la lipotimia y a otros contratiempos para nuestro cuerpo y nuestra salud, pero nada más lejos de la realidad.
Desde BestDiet, en el artículo de hoy, os contamos cómo adaptar la práctica del ayuno intermitente al periodo vacacional, para que no sea un impedimento sino una herramienta salvadora para un periodo repleto de excesos.
Beneficios de realizar ayuno intermitente en verano
El verano trae consigo un periodo de inestabilidad, días más largos, mayor actividad social, cenas ligeras, comidas fuera de casa que suelen afectar al bienestar general. El verano tenemos una rutina mucho más flexible pero esto no impide que se pueda practicar el ayuno intermitente de manera sana y correcta.
Digestiones más suaves que aumentan la sensación de ligereza
Al espaciar las comidas y no saturar a nuestro cuerpo de alimento, y contribuyendo a que sean alimentos naturales y frescos propios de esta época (ensaladas, frutas, gazpachos…), el cuerpo experimentará una carga digestiva menor, por tanto una mayor ligereza en el día a día, mayor energía y se encontrará mejor físicamente para llevar el rendimiento deportivo a otro nivel.
Mayor facilidad para ayunar
En verano es habitual tener menos hambre por la mañana pues el calor afecta a nuestro apetito, y por tanto son muchas las personas que optan por empezar el día con líquidos y esperar al almuerzo para realizar su primera comida. Para este tipo de ayuno es recomendable el uso de batidos proteicos que nos ayuden a saciar el apetito entre horas.
Mejor control de peso
Con el ayuno intermitente en esta época del año, reducimos la ingesta calórica, experimentando una menor carga digestiva y favoreciendo la pérdida de peso de una forma saludable y sostenida.
Más energía mental
El ayuno intermitente bien ejecutado es una forma de potenciar la agilidad y claridad mental, en jornadas laborales más reducidas, que requieren de una concentración extra por las altas temperaturas.
Precauciones a tener en cuenta con el calor
Aunque en la mayoría de casos, el ayuno intermitente tiene muchos beneficios, también debemos ser conscientes que en esta época se necesita atender unas ciertas precauciones para no dañar nuestra salud ni organismo:
- Hidratarse constantemente: no debemos descuidar la ingesta de líquidos durante los periodos de ayuno en verano, pues el calor incrementa nuestra sudoración y por tanto, es esencial beber agua, infusiones frías o agua con electrolitos sin calorías, y dejar a un lado bebidas azucaradas o alcohol.
- Escuchar nuestro cuerpo: esta debe ser una tarea impuesta para todos los días del año, que se incrementa en verano donde los ayunos pueden producir mareos, debilidad o irritabilidad. Si en algún momento presenciamos estos síntomas debemos reducir el tiempo de ayuno o cambiar de método.
- Evitar actividades físicas en ayunas a altas temperaturas: Debemos adaptar la rutina de ejercicio al entorno climático, si el calor es excesivo es recomendable entrenar al principio o al final del día para no deshidratarse.
¿Qué tipo de ayuno intermitente es más efectivo en esta época?
Existen diferentes tipos de ayunos intermitentes, no hay ninguno más válido que otro. Lo que sí debemos es conocer muy bien nuestro cuerpo y consultar con especialistas para que nos aconsejen cual es el método que mejor se adecua a nuestras condiciones y objetivos. Los tres que exponemos a continuación son los que mejor se adaptan a rutinas veraniegas:
- Ayuno flexible: también conocido como ayuno espontáneo donde se permite la omisión de algunas comidas como desayunos o almuerzos pero sin ninguna instrucción estricta.
- Ayuno 16:8 o 14:10: son los ayunos más populares y consiste en comenzar la alimentación al mediodía y terminar a las 20h o 22h en función de la vida familiar o social.
- Ayuno temprano (12.00-18:00): es un método bastante compatible con el verano pues lo que promueve es realizar cenas muy ligeras o incluso saltárselas, acto que en verano, en muchas ocasiones para poder descansar mejor se recomienda.
¿Cómo romper el ayuno intermitente correctamente?
Es imprescindible que rompamos este ayuno intermitente de la manera correcta, pues venimos de un reposo intestinal prolongado y por tanto nuestro sistema digestivo necesita comidas ligeras que no causen molestias ni distensiones.
Romper con comidas no grasas, que permiten a nuestro sistema digestivo reactivarse de manera progresiva como frutas, verduras frescas, grasas saludables o proteínas ligeras. En nuestra web podrás encontrar numerosas recetas sanas para despertar a tu estómago. La forma de masticar e ingerir también es relevante, comer de manera lenta, en pequeñas porciones nos ayuda a focalizar la atención y a disminuir el consumo de calorías, lo cual es imprescindible tras el ayuno.
Mantener una alimentación rica en minerales ( como potasio o magnesio) durante las ventanas alimenticias del ayuno intermitente nos ayuda a prevenir la fatiga y a equilibrar los electrolitos, es por eso que en Best Diet ponemos a tu disposición una amplia variedad de productos y complementos alimenticios ideales para consumir durante dicho ayuno.
